- El encuentro contó con la participación de más de 15 Organizaciones de Sociedad Civil de Honduras, entre agrupaciones juveniles, organizaciones cristianas, derechos humanos, veeduría ciudadana, entre otras.
- Entre las primeras actividades a desarrollarse está la construcción de una red nacional que implemente un plan de actividades que permita evaluar la gestión gubernamental en el cumplimiento de los mandatos de Lima, particularmente en la lucha anticorrupción.
La Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), capítulo de Transparencia
Internacional en Honduras y la Asociación de Organismos No Gubernamentales (ASONOG), hicieron el lanzamiento nacional de la red de Organizaciones de Sociedad Civil del Observatorio Ciudadano de Corrupción (OCC), misma que ejecutará acciones de investigación, comunicación, capacitación e incidencia a fin que los gobiernos cumplan a cabalidad con su deber de luchar contra las prácticas ilícitas y redes corruptas.
En la jornada participaron más de 15 organizaciones de la sociedad civil que tienen una larga tradición en lucha anticorrupción en Honduras, y otras que tienen elevado compromiso con procesos de veeduría ciudadana y auditoría social, destacando entre ellas; organizaciones defensoras de derechos humanos, grupos de la diversidad sexual (LGTBIQ+), organizaciones indígenas, grupos de ascendencia africana, grupos religiosos progresistas, medios de comunicación o actores influyentes ya posicionados en el tema
de corrupción y otras identificadas localmente con gran vínculo en la lucha anticorrupción.
En la inauguración del evento, el director ejecutivo de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), Carlos Hernández señaló que “la corrupción en Honduras, sigue robándole la vida a muchos hondureños”, por lo que se hace necesario hacer un esfuerzo importante para enfrentar el gran reto de volver eficiente y decente la administración pública.
Por su parte, José Ramón Ávila, director ejecutivo de la Asociación de Organismos No Gubernamentales (ASONOG) y representante del Foro Ciudadano de las Américas (FCA), en Honduras, subrayó lo importante que significa la participación ciudadana en la lucha anticorrupción, tanto en el ámbito nacional, como en el plano internacional.
Ávila, precisó como grandes retos y desafíos de la Sociedad Civil en la región “hacer un control oportuno a las acciones de los Estados, adaptar la acción de control social a la nueva normalidad generada por la pandemia de COVID- 19 y ejecutar una acción rigurosa a las operaciones de compras y contrataciones del Estado”.
En representación del Comité Ejecutivo del Observatorio Ciudadano de Corrupción (OCC), Samuel Rotta Castilla, Director Ejecutivo en Proética (Perú), adelantó que una de las más relevantes actividades del OCC, será la concerniente a realizar evaluaciones sobre qué tan efectivos son los Estados en la lucha anticorrupción, permitiendo identificar rezagos en el cumplimiento de compromisos y deberes derivado de instrumentos internacionales como el “Compromiso de Lima”, facilitando información clave a la
Sociedad Civil para efectuar acciones de incidencia ante los gobiernos.
En cuanto al trabajo que específicamente realizará el Observatorio Ciudadano de Corrupción (OCC), en Honduras, la directora de programas de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), Maribel Muñoz, dio a conocer que se constituirá una red nacional que implementará un plan de actividades que permita evaluar la gestión gubernamental en el cumplimiento de mandatos derivados del Acuerdo de Lima, la ejecución de estrategias de comunicación y la realización de acciones de incidencia antes funcionarios del Estado. Cada una de estas redes será liderada por el capítulo nacional de Transparencia Internacional (TI), y el representante de Foro Ciudadano de las Américas (FCA).
“La conformación de esta red nacional, permitirá trabajar en coalición y tener más fuerza para lograr los objetivos establecidos, integrará a organizaciones de la sociedad civil y otras no estatales, en función de una categorización que facilite la representación transversal de la sociedad, particularmente brindando espacio a grupos en condición de vulnerabilidad que puedan ayudar a dar una mirada más inclusiva a la valoración de los avances en el cumplimiento de instrumentos internacionales anticorrupción, con énfasis
en el Compromiso de Lima”, puntualizó Muñoz.
Durante el evento de lanzamiento los asistentes coincidieron que el OCC es una oportunidad extraordinaria para que las organizaciones de la sociedad civil de Honduras, puedan ejercer su derecho de ejecutar acciones de control social y determinar qué tanto ha cumplido el Estado con su deber de administrar de forma adecuado los recursos del presupuesto público y como los programas y proyectos implementados con fondos estatales impactan positivamente en los más necesitados de la sociedad.